La palabra emprendedor viene del francés que significa Pionero, también viene del latín que significa cometer, la misma es usada para referirse a aventureros, personas que van vagando por el mundo sin saber lo que pueden encontrarse en el camino.
Seguidamente se fue utilizando para referirse a una persona innovadora, alguien que comienza una empresa, una persona flexible, didáctica, creativa, orientando al crecimiento y que sea capaz de asumir riesgos.
De hecho, a medida de discusiones sobre dicho término y definición, algunos emprendedores no son necesariamente de carácter innovador, pues han puesto en marcha negocios con ideas que sin tener un mercado de carácter de innovación, es decir, han sabido dar respuestas a las necesidades de las personas que resultaron ser todo un éxito.
Por tal motivo la mayoría de las ideas de nuevos negocios o empresas no vienen necesariamente de descubrimientos técnicos, sino de las actividades observables de la vida cotidiana.
En función a esto, lograr ser una persona emprendedora e iniciar su propio negocio es posible, se debe tener en cuenta ciertas características, la principal es alcanzar las actitudes creativas, ya que, la mente es el material y no es físico, por lo mismo no tiene descanso, trabaja todo el tiempo y sin detenerse.
De esa manera cualquier persona tiene sus capacidades creativas, solo debe aprender a desarrollarla.
Características de un emprendedor
A nivel Psicológico:
- Confiar en sí mismo
- Tener valor suficiente para arriesgarse
- Capaz de analizar sus propios temores
- Serenidad al afrontar momentos difíciles
- Ilusión al emprender un proyecto
Cualidades Interactivas:
- Capaz de motivar
- Saber elegir a sus colaboradores
- Capaz de tomar decisiones
- Necesidad de la organización
- Capacidad de coordinación
- Capacidad de direccionar equipos
- Capaz de analizar su realidad, su entorno y las necesidades
Motivación para Emprender
La realidad muestra que la mayoría de las personas que quieren emprender lo hacen principalmente por su vocación o por necesidad.
Ambas son válidas, debido a que el motivo de la creación del negocio no afecta su desenvolvimiento, ya sea el mencionado proyecto un éxito o un fracaso, pues eso no va a depender de dicho motivo.
Al analizar las razones de más frecuentes por los cuales las personas desean emprender su propia empresa, se obtienen varias, algunas de esas son:
- Hacerse “Millonario”
- La obtención de algún beneficio
- Demostrarle algo a alguien en especifico
- La obtención de su propio trabajo
En referencia a lo anterior, se debe tener en cuenta que cual sea el motivo de la persona en iniciar su propio negocio, se va a encontrar con ciertas responsabilidades muy grandes que debe cumplir, como por ejemplo invertir económicamente, dedicar muchas horas de sus días, organizar y utilizar recursos humanos para el contrato de nuevos empleados, y por su puesto el temor constante de no conseguir el éxito y perder todos sus recursos en ello.
Es usual, que esos emprendedores piensen o crean que los proyectos de empresa son fáciles, se debe tener en cuenta que la creación de un negocio en algunos casos puede ser peligrosa, y más aún si no se conoce a profundidad los aspectos técnicos ni comerciales.
Uno de los errores más grandes que comete una persona que está iniciando su empresa, es creer que será sencillo, respecto a que uno de los problemas que se dan a la hora de ponerse en marcha es que existen muchas personas arriesgadas hasta llegar a un nivel de irresponsabilidad, como seria de ejemplo aportar gran parte de su capital o patrimonio de su familia.
La Familia para el Emprendedor
La familia de una persona forma parte fundamental en todo momento, de igual manera funciona aquí, al momento de iniciarse como emprendedor, el apoyo de ellos ante su proyecto y sobre todo se deben destacar las siguientes circunstancias:
- Si el entorno familiar apoya su iniciativa
- Si algún familiar tiene la posibilidad de aportar dinero
- Si el núcleo familiar depende de los ingresos o de aquellos que puedan obtener como resultado del proyecto.
Por consiguiente, al combinarse las circunstancias mencionadas anteriormente se pueden obtener conclusiones muy positivas o a su vez negativas. De tal manera que va a depender de circunstancias personales que el buen asesor debe tomar en cuenta y tener al tanto a su emprendedor.
Situación Personal del Emprendedor
Como todo, la mayoría de las personas actualmente deberían tener mucha seguridad al momento de tomar una decisión de suma importancia, sobre todo cuando se trata de iniciar un nuevo negocio o empresa.
Pero, pues muchas de esas personas no tienen la gran dicha de poseer esa máxima confianza como otras que si la tienen, por lo que se le pueden presentar diversos inconvenientes, el principal de ellos se puede decir que es el temor de no tener un conocimiento previo al momento de la iniciación de la dicha empresa.
De tal modo, que al atender y poner a prueba el grado de conocimiento de la misma, se resalta que el emprendedor no tiene la obligación de ser todo un especialista en varios ámbitos laborales, para poder lograr ponerla en marcha, pero si se debe considerar tener una buena idea general de todos los aspectos que lo comprometen y que componen al negocio.