Hacer lo que nos gusta es determinante para nuestro éxito, pero muchas veces nos desempeñamos en funciones o actividades sencillamente para que nos genere un ingreso económico, sin que esto en realidad nos mantenga motivados.
Por lo anterior, es muy importante determinar cuál es nuestra verdadera vocación, pues, te aseguramos que hay nada más reconfortarte que hacer todos los días lo que más te apasiona.
En este orden de ideas te invitamos a que realices el Test de Preferencias Vocacionales de Kuder, una prueba rápida y sencilla que te ayudará a saber cuál es la actividad que más te gusta hacer.
⇨ ¿Qué es la Prueba o Teste de Kuder?
Esta prueba fue creada en el año 1934 por Frederick Kuder, con la finalidad de detectar y determinar en cuáles áreas los individuos se sienten más motivados e interesados según sus preferencias, lo que si lugar a dudas arroja una tendencia vocacional valida y confiable.
Aspectos que mide
- Indaga en los gustos, intereses y preferencias de una persona.
- Mide el desempeño que presentan los individuos frente actividades o temas que despierten mayormente su interés.
- Determina el área de interés de una persona.
Áreas que emplea para determinar las preferencias e intereses
- Actividad al aire libre.
- Interés mecánico.
- Interés para el cálculo.
- Interés científico.
- Interés persuasivo.
- Interés artístico-plástico.
- Interés literario.
- Interés musical.
- Interés por el servicio social.
- Interés en el trabajo de oficina.
¿En qué consiste el Test de Kuder?
Es una prueba que a través de 168 preguntas, busca determinar las preferencias vocacionales de los individuos, puesto a que las interrogantes están asociadas a las áreas de interés que te mencionamos en el apartado anterior.
El Test de Kuder puede ser presentado por adolescentes y adultos y por lo general emplean máximo 40 minutos en responderlos. De igual modo la aplicación puede ser individual o colectiva.
Áreas de aplicación del Test de Kuder
El test de Kuder puede aplicarse en las áreas clínica, laboral y educativa.
En el área educativa, se aplica a adolescentes, para ayudarlos a determinar su verdadera vocación y así alentarlos a hacer una carrera universitaria relacionada con sus intereses, gustos y preferencias.
En el área laboral, se emplea para ayudar a los trabajadores a desempeñarse en las funciones que más les gusten para de ese modo obtener mejores resultados.
